Los árboles Criollos son nativos de la América Central y del Sur, y su fruto es una de las variedades de cacao más antiguas, raras y finas del mundo. Pero su crecimiento es especialmente difícil y extremadamente vulnerable a una gran variedad de amenazas ambientales.
En 2008, para proteger esta especie ancestral, Puratos compró 140 hectáreas de tierra cultivable en Tikul, en el estado de Yucatán (México). Plantando más de 10.000 árboles, nuestro objetivo no es producir un chocolate único en propiedades, sino preservar la ecología y la biodiversidad del área proporcionando un refugio para una amplia gama de vida silvestre.
El proyecto también ofrece un entorno estable y seguro de trabajo para las comunidades locales y a los trabajadores se les ofrece la posibilidad de usar métodos avanzados de cosecha que les permite preparar un buen cacao fermentado.
Tikul es una inversión a largo plazo que contribuye a la conservación del entorno, al turismo sostenible y al bienestar de quienes trabajan y viven en la zona.
A día de hoy, el proyecto en Tikul se divide en dos partes:
Actualmente, la plantación de cacao proporciona refugio para una amplia gama de plantas y animales locales. Uno de nuestros objetivos es plantar más de 100.000 árboles adicionales.
Otro de nuestros objetivos es ayudar a la población local, asegurando que la plantación y el Ecomuseo contribuyan al empleo de forma directa e indirecta, garantizando un trabajo en un entorno seguro. Finalmente, queremos que el proyecto ayude a los artesanos locales, estableciendo una relación entre el cacao y la cultura Maya. En este sentido, queremos asegurar un futuro sostenible para todos los que están conectados a la producción del cacao.
Si deseas obtener más información acerca del proyecto en Tikul (o si quieres saber cómo puedes ayudarnos), por favor visita nuestra página de contacto.